My rating: 5 of 5 stars
La conclusión que yo he sacado de esta novela magistral es que la creencia de Dios del autor pasa ineludiblemente por el amor y la fe en el hombre. ¿Cómo podemos redimirnos y seguir siendo fieles a nosotros mismos?
Pretende además, creo, a través del padre y los hermanos Karamazov, así como del resto de personajes de esta ciudad de provincias, mostrar un fresco de la situación moral, religiosa, social y política en sentido amplio de la Rusia de su tiempo.
Y aunque puede que el autor tome partido, no juzga.
Me ha sorprendido la agudeza y eficacia del retrato de los personajes, a veces sólo con breves pinceladas y un rápido diálogo. En otros se entretiene más. Me admira el perfecto retrato del psicópata "avant la letre" que realiza y cómo no teme reflejar como somos capaces de lo mejor y peor, muchas veces, simultáneamente.
View all my reviewsPorque soy un Karamazov; porque cuando caigo al abismo, caigo de cabeza. Y te advierto que me gusta caer así: este modo de caer tiene cierta belleza a mis ojos. Y desde el seno de la abyección entono un himno. Soy un hombre maldito, vil y degradado, pero beso el borde de la túnica de Dios.
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