Licor de Ajenjo. La mezcla es el secreto
. Iba a ser una canción. Decidme qué os parece, porque yo me siento aún más rara de lo normal:
Zumo de limón,
azúcar negro,
calma de la mar
que a la tierra llega
mientras, sudando,
mi alma hierve
bajo la Luna llena.
Zumo de limón
azúcar negro,
conjure esa su calma
mi ansia de pelea
¿Ya estaba entonces enfadada? ¿Estoy enfadada?
...apenas ocurre algo inesperado en la mente de una persona y todos los seres, sobre todo los más próximos, desconfían, se asustan, huyen..."
25 de mayo, Dia del Orgullo Frikki.
Lo he pasado muy bien esta tarde en el mercado medieval de Manises, incluso con la amenaza de tormenta sobre nosotros.
Con esta acumulación de cuatros, ya soy cuatrera, como me dijo mi amigo Manel. Aunque... no se si está ya una para trotes ;-)
Paseando con mi cámara por el Barrio del Carmen, en Valencia, me encontrado con esta nota. Un recordario para todos, un post-it de Amnistia Internacional en una de las calles del Barrio.
Que no caigan en el olvido.
No, las salas de espera no son todas iguales: con o sin revistas, minimales o recargadas de títulos, con música ambiente o mejor no, alborotadas o silenciosas... sin embargo, nosotros, los que esperamos, sí nos parecemos, incluso en la amplia gama expresiva que va desde la resignación al fastidio. ¿Y los que protestan, los desconfiados, los que suspiran, los asustados todos?
Como yo cada tres meses en mi centro de salud y cada seis en Consultas Externas de la Fe.
La tienda más antigua de Valencia, ya amenzaba derrumbe. Las lluvias de esta semana estan acabando con ella. Eso sí, tenemos un cicuito urbano de formula 1 de categoria.
Artículo en el Levante
Si una cosa he aprendido de Pichi y de mis amigos es que que te tachen sirve para volver a pintar encima, y mejor. El Graffiti es como la vida misma, y sólo es real cuando muere, es decir, pintamos, vive y luego muere, de la forma que sea pero...fallece. No hay que preocuparse ;)
y además un fragmento de la "Balada de la lenguas envidiosas de Francois Villon, que me vino a la cabeza en cuanto vi el destrozo:
En sesos de gato que odia pescar,
negro, tan viejo que no tenga un diente en las encías;
de un viejo mastín, que vale igual de caro,
rabioso, en la baba y saliva;
en la espuma de una mula asmática
bien troceada con buenas tijeras;
en agua en que las ratas zambullen morros y hocicos,
igual que ranas, sapos y alimañas peligrosas,
serpientes, lagartos y otros nobles pájaros,
sean fritas esas lenguas envidiosas.
