Casi la misma frase, en dos libros que simultáneo. Dos libros escritos por mujeres. Distinto sentido del humor, misma rebeldía. (Y además se parecen, creo)
—Las que no dan, no reciben —afirma, como si fuera un lema de Merilance y no algo que se le acaba de ocurrir. Asiente con la cabeza, como aprobando sus propias palabras, y Olivia la imagina bordándolas en un cojín. ()Tarda un poco, pero la cerradura hace clic y se abre la puerta, dando paso a una habitación pequeña y limpia llena de cojines y mantas con mantras bordados. Por la gracia de Dios. Un lugar para todo y todo en su lugar. Una casa en orden es una mente en paz.
V.E.Schwab. "Gallant" (202
Dentro, el estrecho vestíbulo desprendía un fuerte olor a linóleo y abrillantador de metales y el señor Porritt olisqueó con admiración y reconoció el mérito de su hermana. Sabía cómo mantener una casa. Limpia como los chorros del oro. Un sitio para cada cosa y cada cosa en su sitio.
Margery Sharp. "Clunny Brown" (1944)
¡Hola, Ajenjo!
ResponderEliminarDecirte que tienes un excelente contenido.
Te dejo el enlace de mi blog por si te apetece pasarte por él, seguirnos y comentarnos.
Saludos desde blueshendrix.blogspot.com
¡Nos leemos!
Qué curioso, buena observación, también hay parecido. Pasar del detalle de la casa a la apreciación de quien la observa, suele ser un recurso en las novelas que nunca está demás, porque ambienta y da luces sobre el carácter de los personajes.
ResponderEliminarPor cierto, no conozco ninguna de las dos escritoras. Gracias por los datos. Me quedo suscrita !